Os presento a Elva Trullén, la cellista esquinera.
Con 9 años le preguntó su madre: ¿quieres ir al conservatorio? A lo que contestó: ¿qué es eso? Empezamos bien… total, que se encandiló del violoncello. Tras obtener el título en el Conservatorio Profesional de Música de Zaragoza hizo las maletas y se fue a estudiar a Musikene (Conservatorio Superior de Música del País Vasco) gracias, también, a una beca de Muface. Allí tuvo la oportunidad de formarse con maestros del violoncello como Asier Polo, Damián Martínez y Ruslana Prokopenko (solista de la Sinfónica de Euskadi) así como con figuras internacionales que la guiaron y le hicieron adorar la música de cámara (Almudena Cano, Eldar Nebolsin, Charles André Linale, Karsten Dovers y los integrantes del Cuarteto Casals entre otros). Durante esta etapa, fue violoncello principal de la orquesta del conservatorio durante dos años. Formó parte de la JONDE (Joven Orquesta Nacional de España), siendo cello co-principal y realizó una gira por Francia con la Joven Orquesta de Tours.
Le gusta el arte, dibujar, leer, el cine, viajar, comer bien, dar paseos por la montaña (sin mucho agobio, que cansarse hoy día está sobrevalorado) y disfrutar de la naturaleza… bueno, lo reconoce, Netflix también le gusta (y echar algún vistazo a First Dates).
Durante su infancia y juventud, obtuvo dos primeros premios de violoncello en los certámenes nacionales patrocinados por Ibercaja y realizó recitales para Juventudes Musicales. Ha recibido clases de postgrado de Claudio Bohórquez y László Fenyő, así como clases y consejo de Elías Arizcuren, David Etheve (solista de la Sinfónica de Galicia) o Suzana Stefanovic (solista de la Orquesta de Radiotelevisión Española).
Tras terminar los estudios superiores en 2006, comenzó su actividad laboral. En el ámbito de la orquesta sinfónica, trabajó como violoncello principal en Oviedo Filarmonía entre 2013 y 2014, violoncello tutti y co-principal en Fundaçao Orchestra Estúdio Guimaraes en 2012 y ha colaborado con la Orquesta Sinfónica de Euskadi. Esta actividad le ha permitido tocar en importantes salas de Alemania, Francia, Portugal y España, así como aprender de directores como Gunter Schuller, Patrick Davin, David Giménez o Miguel Ángel Gómez Martínez y compartir escenario con artistas de la talla de Ainhoa Arteta, José Carreras, Ennio Morricone, Uthe Lemper, Victoria Mullova, Natalie Clein, Wim Mertens y Guy Braunstein (concertino de la Filarmónica de Berlín).
No le gusta el machismo, el maltrato animal, lo vapuleada que está la cultura y lo mucho que nos afecta en nuestras relaciones personales las distintas opiniones políticas.
En lo tocante a la música de cámara ha formado parte de grupos de música barroca (Conductus Ensemble), de música contemporánea (Kuraia), orquesta de cámara clásica (Camerata Eurídice, Camerata Cambrensis), cuarteto de cuerda (Azer Quartet) y cuarteto de cellos (Hello Cello); Actuando en festivales como La Quincena Musical de San Sebastián, 365 Jazz Bilbao (compartiendo escenario con Kurt Elling), Festival Internacional José de Nebra en Calatayud, Semana de Música Antigua de Álava, Festival de Música Antigua de Zenarruza, Ciclo de Música Contemporánea de Málaga, Temporada de Música de Cámara del Euskalduna Jauregi o Musikaste entre otros.
Lo tiene claro, en otra vida le gustaría no tener miedo a las alturas y ser piloto de aviones (o pilota, o pilote…), y recorrer el mundo allende los mares! Aunque también le gustaría ser arqueóloga, o pintora, también sería guay ser un tiranosaurio rex… esto de trabajar con niños
En el campo pedagógico ha sido profesora de violoncello durante tres años en el Orfeón Donostiarra, profesora en el Curso Internacional de Música de Vitoria y formado a la sección de violoncellos en las concentraciones de la Joven Orquesta de Euskal Herria. Ha estrenado obras de Ramón Lazcano, Luca Belcastro y Gabriel Erkoreka y participado en grabaciones de composiciones inéditas de Fernando C. Lapa, Nuno Côrte Real, António Pino Vargas y David Chesky.
Tras mucho ir de aquí para allá tomó la decisión de quedarse en su tierra, donde está la gente que quiere y donde se siente en casa. Poco a poco ha ido haciéndose un sitio en Zaragoza y puede decir que tiene la suerte de disfrutar de su trabajo. Sube a los escenarios con compañeros de gran talento de los que aprende y disfruta a su lado como una niña y sus clases le reportan grandes alegrías.
Actualmente es profesora de violoncello, música y movimiento y lenguaje musical en el Teatro de las Esquinas. Colabora con distintas agrupaciones como la Orquesta Reino de Aragón, Orquesta Sinfónica de la Rioja, Cantantibus Organis y la Orquesta de las Esquinas. También es músico-actriz en el espectáculo Las Cuatro Estaciones ya no son lo que eran de la compañía de teatro Che y Moche y actúa en espectáculos de la compañía Teatro Imaginario.
Lo que más le gusta de la orquesta sin duda es su ilusión, sin ella es imposible conseguir que un proyecto de estas características salga adelante. Una orquesta que toca en directo, de memoria, con acting, cantando, bailando, compaginando otros trabajos… solo puede prosperar con mucha disponibilidad y el esfuerzo de cada uno de sus componentes, además del compañerismo, el respeto y las ganas de superación.
